Recientemente se reveló que Richard Taylor, supuesto amigo de Paul Walker, sería responsable por la desaparición de 7 vehículos pertenecientes a su colección, hecho que se llevó a cabo un día antes de la muerte del actor, según nuevos reportes.
De acuerdo a una demanda realizada en marzo del 2014, el padre de Paul, William Walker, ha acusado a Taylor por "intencionalmente y fraudulentamente esconder la existencia y localización de estos vehículos para apropiarse falsamente de ellos".
Los representantes legales de Paul alegan que Taylor no incluyó en la lista de inventario de automóviles 7, entre los que se encuentra un Porsche GT3 RS de 2011.
Este año, William Walker realizó otra demanda contra los representantes legales de Roger W. Rodas, el hombre que falleció junto a Paul en el accidente. Una demanda que exigía devolver otros vehículos pertenecientes al actor, entre los que se encuentran 17 coches, de los que resaltan un Ford Mustang 1969 y Audi R8 de 2010. Por el momento se desconocen las causas que llevaron a la desaparición de estos.