“Los doctores pudieron removerle el ventilador hoy y ella está despierta y hablando. Maddie continúa recibiendo oxígeno y sigue siendo monitoreada de cerca y hasta ahora parece que no sufre de ninguna consecuencia neurológica del accidente”, indica el comunicado.
El accidente de Maddie sucedió en su casa de Kentwood, Louisiana, Estados Unidos, cuando se encontraba frente a sus padres, conduciendo un Four Track y un mal giro a la derecha para evitar una zanja provocó que el vehículo cayera en un estanque dejándola sumergida por unos minutos.
“El Four Track y la niña quedaron sumergidos justo frente a sus ojos. En segundos la madre, el padre y otros miembros de la familia entraron al estanque para intentar rescatar a la niña, sin éxito. La niña estaba atrapada, asegurada con el cinturón de seguridad y otra malla de seguridad del auto. En dos minutos llegó el servicio de ambulancias Acadian y ayudaron a rescatar a la niña de esas aguas frías”, explicó el comunicado.
Cabe mencionar que el pasado lunes 6 de febrero, Britney Spears publicó una foto de su sobrina en Instagram, para pedir a sus fanáticos que rezaran por la niña. “Necesito todos los mejores deseos y oraciones para mi sobrina”, escribió la artista.