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En este evento el cantante aprovechó y aclaró todo el conflicto que andaba rumoreándose desde hace varios días con respecto a la canción “Happy Happy”, que recientemente grabó con sus hijos a quienes hace llamar Los Mendoza.
El sencillo primeramente estaba destinado a ser una coautoría del solista con el dúo musical La Melodía Perfecta, incluso ya tenían un acuerdo al que habían llegado en reuniones anteriores, llegando a grabarse la letra con las voces de los hermanos Martínez.
Gio y Gabo, luego del estreno de la canción hicieron saber su descontento inmediatamente “Entre todos comenzamos a hacer el tema, se hicieron los arreglos, la producción; trabajamos con el equipo de marketing, pero vimos que sacó el tema con sus hijos y nos sentimos bastantes dolidos porque jugó con los sueños de las personas”, expresaron los artistas, dejando al ex compañero de Chyno Miranda como el malo de la historia.
Este cuento revolucionó a la prensa dejando a Nacho como un ladrón de canciones, además salieron a relucir declaraciones por parte de algunos programas de farándula que decían que no era la primera jugarreta del intérprete de “Báilame”, pues en otras oportunidades también se había adueñado del producto final de algunas producciones.
Miguel Ignacio no se quedó con esa espinita y en la rueda de prensa desmintió a los jóvenes puntualizando que ellos no se sentían cómodos con el coro de la canción, sin embargo, se llevaron el tema, pero rescató que luego de dos semanas no habían dado ninguna respuesta, a lo que trató de comunicarse con Nelson Marbel, papá de los Martínez pero fracasó y fue cuando decidió grabar con sus pequeños niños.
Entre otras palabras hizo saber también que no tiene ningún resentimiento contra los hermanos y que volvería a trabajar con ellos pero bajo diferentes condiciones.
“No me parece de tan buen gusto que saques a relucir esto cuando te diste cuenta de que el tema funciona y que es un éxito. Entonces, porqué te vas a querer guindar del éxito que es de esos muchachitos”, fueron las palabras del señor Miguel Ignacio Mendoza para decir prácticamente que La Melodía se quedó pegada.
