"Aftermath" es el cuarto disco de estudio de la banda de rock The Rolling Stones en el Reino Unido y su sexto disco en los Estados Unidos, estrenado el 4 de enero de 1966, es el primero en integrar exclusivamente composiciones de la autoría de
Mick Jagger y Keith Richards, una demostración de la consolidación artística de la agrupación artística. El disco brilla por su diversidad estilística e instrumental, auspiciada por Brian Jones, incluyendo el sitar, el dulcémele de los Apalaches, marimbas y koto japonés, al igual que la guitarra, la armónica y los teclados, aunque la mayor parte de las canciones todavía está atada al blues eléctrico de Chicago.
Este fue el primer disco de los Rolling Stones grabado en su totalidad en Estados Unidos, además de su primer álbum lanzado en estéreo. También es uno de los primeros discos de rock que superan la marca de 50 minutos, y contiene uno de los primeros temas del género en superar los 10 minutos de duración ("Goin 'Home"). En el Reino Unido llegó a la primera posición de las listas, mientras que en Estados Unidos estuvo en el puesto número 2 y también consiguió la certificación de platino.