Biografía de Kjarkas
Kjarkas es un conjunto boliviano. Fue formado en Capinota, Cochabamba, Bolivia, el 23 de junio de 1971. Esta agrupación fue creada por los hermanos Wilson, Gonzalo y Castel Hermosa, junto a Edgar Villaroel. Desde sus inicios, Kjarkas ha logrado consolidarse como uno de los referentes de la música folclórica boliviana, alcanzando una notable popularidad tanto a nivel nacional como internacional.
Ha colaborado con reconocidos compositores como Ulises Hermosa, Élmer Hermosa, Edgar Villaroel, Edwin Castellanos, Fernando Torrico, Gastón Guardia y Guillermo Ponce. Estas colaboraciones han contribuido a enriquecer su repertorio y a posicionar su música en el corazón de los amantes del folclore latinoamericano.
Entre sus canciones más emblemáticas se encuentran "Llorando se fue", "Vivir junto a ti", "Tiempo al tiempo", "Comarapa", "Imillitay" y "Ave de cristal". Cada una de estas melodías refleja la rica herencia cultural de Bolivia y ha dejado una huella imborrable en la historia de la música folclórica de la región.
Significado del nombre
El nombre Kjarkas se traduce como "nada" o "sin afinar". Este concepto refleja cómo se sentía el grupo en sus inicios, ya que buscaban establecer una analogía entre un instrumento desajustado y la situación inicial de la agrupación musical.
Inicios de Kjarkas en la Música
Los Kjarkas comenzó inicialmente como una respuesta a las necesidades económicas de sus integrantes, quienes se dedicaban a recorrer pueblos interpretando zamba argentina. En aquel entonces, la música autóctona de Bolivia aún no contaba con gran repercusión. Sin embargo, con el tiempo, diversas peñas comenzaron a resaltar ritmos más representativos del país, como la cueca, el huayño y el bailecito, promoviendo las obras de compositores como Simeón Roncal, Gilberto Rojas y Teófilo Vargas. Fue en este contexto que Los Kjarkas se integraron a la transformación musical, estableciendo las bases que más tarde los llevarían al éxito.
Con el paso del tiempo, algunos miembros del grupo decidieron abandonar la formación original, lo que llevó a Gonzalo Hermosa a reestructurar la banda junto a los músicos Eddy Carpio, Antonio Canelas y Alcides Mejía. Durante más de una década, Los Kjarkas se dedicaron a perfeccionar su arte en la composición e interpretación de la música andina. Su primera presentación en La Paz tuvo lugar en 1975, después de actuar en varias fiestas privadas. Ese mismo año, representaron a Bolivia en un festival de música folklórica en Brasil.
La conexión entre Alcides Mejía y los hermanos Hermosa —Elmer, Ulises y Gonzalo— se dio a través de José “Danger” Salamanca. En la formación inicial de Kjarkas, los hermanos Wilson, Castel, Gonzalo y Edgar habían decidido disolver el grupo tras su regreso de un viaje a Chile, lo que dejó a la banda desarticulada durante un tiempo. Alcides, por su parte, fue un participante clave en la primera reestructuración de Kjarkas en 1974, junto a Ulises y Elmer, sentando las bases para lo que se convertiría en una de las agrupaciones más emblemáticas de la música andina.
Género musical
Kjarkas se destaca por su contribución a la música folclórica andina. Su género principal es el folclore. Su estilo se caracteriza por la fusión de ritmos tradicionales andinos, utilizando instrumentos típicos como la guitarra, el charango, la zampoña y el bombo.
Las letras de sus canciones suelen abordar temas relacionados con la vida en los Andes, el amor, la naturaleza, la cultura indígena y la identidad boliviana. A menudo, sus canciones reflejan una profunda conexión con la tierra y las tradiciones, y muchas de ellas están en quechua y aymara, lenguas indígenas de la región andina. Kjarkas ha sido fundamental en la difusión de la música andina a nivel internacional y ha dejado una huella importante en la cultura musical de Bolivia y de América del Sur.
Trayectoria y Legado
Durante varios años, Los Kjarkas se dedicaron a perfeccionar un estilo musical único, que fusiona ritmos autóctonos con la estructura de ritmos criollos. Este enfoque priorizó la inclusión de instrumentos de viento y el ronroco, además de contar con elaborados arreglos corales. En 1975, el grupo se presentó en La Paz y, un año después, comenzaron a grabar su primer disco.
En 1976, Los Kjarkas publicaron su primer álbum, titulado "Bolivia", en México bajo el sello discográfico Heriba. Este disco, que contiene nueve canciones, fue mayormente compuesto por Gonzalo Hermosa. Con este éxito, el grupo se expandió al incluir a otros dos hermanos Hermosa: Ulises y Élmer, junto a Toño Canelas, Gastón Guardia, Guillermo Ponce y Edgar Villarroel, quien compartía el mismo nombre que uno de los fundadores.
Durante 1977 y 1978, el grupo lanzó dos álbumes bajo el nombre de "Fortaleza", debido a restricciones contractuales. Estas obras, que contenían canciones de raíces folklóricas, fueron reeditadas en 1995 en un solo disco titulado "Sueño milenario de los Andes". En 1979, el disco "Kutimuy" fue lanzado, destacando la canción homónima. Este período marcó el renacer de Los Kjarkas con Élmer Hermosa, Julio Lavayen, Ulises Hermosa y Gastón Guardia, lo que contribuyó a su creciente popularidad, llevando al grupo a realizar giras no solo por Bolivia, sino también por Sudamérica, Europa, Estados Unidos y Japón.
En 1980, lanzaron el álbum "Cóndor Mallku", que incluía canciones románticas, lo que representó un desvío del folklore tradicional. Al año siguiente, con el disco "Canto a la mujer de mi pueblo", el grupo presentó algunas de sus canciones más icónicas, como "Wayayay" y "Llorando se fue", esta última con la participación de Gonzalo Hermosa en el charango, tras la salida de Julio Lavayen. Posteriormente, Lavayen regresó al grupo, junto a Ramiro de la Zerda y Raúl Muriel, quienes se unieron en el álbum "Desde el alma de mi pueblo", participando en la canción "Sunchu t'ikitay".
En 1984, Los Kjarkas fueron invitados al X Festival de Yamaha de la Canción, donde compitieron con más de mil 800 canciones de todo el mundo. La composición de Ulises Hermosa, "Florcita azul", logró el décimo lugar, lo que abrió las puertas al grupo en el mercado japonés.
A finales de la década de los 80, un incidente catapultó a Los Kjarkas a un nivel de fama mundial aún mayor. La agrupación Kaoma lanzó "Chorando se foi", más conocida como "La lambada", que resultó ser un plagio de "Llorando se fue", la célebre composición de Ulises Hermosa. Esta canción estaba registrada en Alemania, lo que llevó a Kaoma a indemnizar a Los Kjarkas con una suma que no se hizo pública. Durante este tiempo, músicos como Edwin Castellanos y Fernando Torrico pasaron por la agrupación, aunque posteriormente formarían el dúo Tupay.
En 1990, Los Kjarkas lanzaron "Ch’uwa yacu", su único álbum en el que no cantaron. Sin embargo, en 1992, el grupo enfrentó un duro golpe con la enfermedad de su compositor Ulises Hermosa, quien falleció en Houston debido a un cáncer. Antes de su muerte, logró terminar su canción "El árbol de mi destino". Al año siguiente, Los Kjarkas publicaron "Hermanos", que incluía la composición de Ulises Tarajchi, con una letra añadida por su hermano Gonzalo, que narraba la historia y los sentimientos de la familia Hermosa.
Durante la década de los 90, el grupo se amplió con la incorporación de Ronaldo Malpartida, Eduardo Yáñez, Alcídes Mejía, Miguel Mengoa y José Luis Morales, continuando su éxito con temas como "Señora su hija", "Mi pecado", "Ave de cristal", "A los 500 años", "La pícara" y "El líder de los humildes". En 1997, publicaron su primer vídeo titulado "Por siempre...", el cual mostraba la presentación del disco en el Hotel Presidente.
El nuevo milenio trajo importantes cambios para Los Kjarkas, que se rejuvenecieron con la llegada de nuevos y jóvenes artistas como Gonzalo Hermosa Jr., Lin Angulo y el japonés Makoto Shishido. Esto dio un nuevo enfoque a sus composiciones, generando canciones como "Lección de vida", "Saya sensual" y "Kamanchaca". En 2006, lanzaron su disco "35 años", conmemorando su trayectoria. Diez años después, en 2016, celebraron sus 45 años de carrera artística con el álbum "La Leyenda Viva".
Uno de los temas más reconocidos de Los Kjarkas es "Llorando se fue", letra de Ramiro de La Zerda, que ha sido reinterpretada por numerosos artistas. Uno de los casos más sonados de plagio fue el de la agrupación brasileña-francesa Kaoma, que lanzó "Chorando se foi" en 1989. Los Kjarkas demostraron su autoría y recibieron una indemnización.
A lo largo del tiempo, "Llorando se fue" ha sido objeto de numerosos plagios, muchos de los cuales podrían no haber sido evidentes debido a la popularidad de los artistas que los interpretaron. Sin embargo, el legado musical de Los Kjarkas sigue vigente, con versiones modernas que continúan celebrando su rica herencia cultural.
Los Kjarkas son una de las agrupaciones más emblemáticas de la música folklórica boliviana, conocidos por su estilo distintivo que combina ritmos andinos y letras que reflejan la cultura, la vida y las tradiciones de los pueblos indígenas de Bolivia. Su contribución a la música folklórica no solo ha promovido la riqueza cultural del país, sino que también ha llevado la música boliviana a un público internacional.